Tablas de cortar

Las tablas de madera son naturales, higiénicas y resistentes, se recomiendan sobretodo para cortar productos secos como el pan o las verduras crudas. La tabla hecha de madera de haya, son más adecuadas para uso diario en la cocina por ser más blanda, y por tanto menos fuertes y agresivas con el filo de los cuchillos. Para limpiarlas, se aconseja pasar un trapo húmedo y ponerlas bajo el grifo. Si la tabla está muy sucia, limpiarla con agua caliente y un jabón suave. Mientras las tablas para picar de poliuretano ter-moplástico (TPU) evitan que se transfieran el color o el sabor y garantizan la higiene mientras trabajas con carne o pescado crudo. Su alta elasticidad actúa como amortiguador y protege la sensible hoja del cuchillo para que permanezca más tiempo afilada. Además, estas tablas para picar se pueden lavar en el lavavajillas, son antibacterianas, resistentes a temperaturas superiores a los 150 ºC y el plástico no absorbe olores.

Sea cual sea la tabla de cocina que escojamos, siempre hay que lavarla después de su uso,especialmente cuando se cortan alimentos crudos como carne o pescado. Las de poliuretano se pueden lavar en lavavajillas, pero las de madera no, se tienen que limpiar a mano. Simplemente con agua tibia, detergente o jabón neutro y una esponja suave. Para eliminar posibles olores podemos lavarlas de vez en cuando con sal y zumo de limón y con el mismo limón se frotamos la tabla. Luego la aclaramos con agua, así quedará limpia, desinfectada y libre de olores y sabores. Además las de madera requieren aplicar una capa de aceite cada cierto tiempo. Después es importante secarlas bien y guardarlas, preferiblemente, al aire. En los cajones y armarios podrían acumular humedad, que no solo las estropea, también puede ser foco de bacterias.